No dijo nada...
no fue necesario.
Sus manos huían del contacto de las mías...
su mirada se volvió distante:
en sus pupilas ya no se reflejaba mi imagen.
No dijo nada...
el silencio se encargo de enviarme el mensaje
que sus labios no se atrevieron a pronunciar
No dijo adiós,
no hubo lágrimas
ni abrazos fríos
pero su beso...
no fue necesario.
Sus manos huían del contacto de las mías...
su mirada se volvió distante:
en sus pupilas ya no se reflejaba mi imagen.
No dijo nada...
el silencio se encargo de enviarme el mensaje
que sus labios no se atrevieron a pronunciar
No dijo adiós,
no hubo lágrimas
ni abrazos fríos
pero su beso...
sus labios...
tenían el amargo sabor de la despedida.
tenían el amargo sabor de la despedida.
©Vicky Arizpe B. (Sayuri)